El Real Apodaca cerró la temporada con un empate 1-1 contra Durango, en un partido decisivo que no logró el resultado esperado para asegurar el pase a la liguilla. A pesar de la intensa lucha en el campo, el equipo no pudo concretar la victoria que necesitaba, dejando el marcador en empate.
El encuentro estuvo lleno de emociones y momentos clave. El primer gol del partido llegó en la primera mitad, cuando Durango se adelantó en el marcador, pero el Real Apodaca respondió rápidamente con un gol de empate que mantuvo viva la esperanza. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos y las oportunidades, el equipo no logró marcar el gol que le habría asegurado el pase a la fase final.
A pesar de la decepción por el resultado, el cuerpo técnico y los jugadores destacaron que este partido dejó importantes lecciones. «Aunque no logramos el resultado que queríamos, aprendimos mucho y seguimos creciendo como equipo. La temporada nos ha dejado valiosas enseñanzas y ahora debemos trabajar más duro para el futuro”, comentó uno de los jugadores al finalizar el partido. El Real Apodaca cierra esta temporada con la satisfacción de haber dado lo mejor de sí en cada partido, con la mirada puesta en seguir mejorando y en alcanzar nuevas metas en la próxima temporada. ¡El trabajo y la determinación del equipo no terminan aquí!